"Oh Señor mío Jesucristo,
Tú que eres el Dios de la Vida,
a tí recurrimos en esta hora de dolor inmenso,
para rogarte te dignes proteger el alma de mi hijo (a)
(se dice el nombre)
que has querido llevarte a tu presencia, oh, Dios mio.
a tí recurrimos en esta hora de dolor inmenso,
para rogarte te dignes proteger el alma de mi hijo (a)
(se dice el nombre)
que has querido llevarte a tu presencia, oh, Dios mio.
Desconocemos los motivosde su partida,
a veces quisieramos entender tus misterios
pero aún sin entender, confiamos
en tu Misericordia y amor por nosotros.
Te rogamos,
que tus ángeles reciban
a nuestro bello querubín en tu reino.
Que tu amor lo guie directamente al cielo,
para que lo agojas en tu seno, Señor Jesús
y le des tu paz verdadera y tu luz eterna.
y le des tu paz verdadera y tu luz eterna.
Que viva felíz, en paz y eternamente
en tu presencia, Señor Jesús,
y en la de nuestro Padre Celestial.
A tí madre Santísima María de Guadalupe,
Madre de Jesucristo y madre nuestra
te rogamos que intercedas por nosotros
te rogamos que intercedas por nosotros
para que encontremos consuelo y fortaleza,
ayúdanos a renovar y fortalecer
ayúdanos a renovar y fortalecer
nuestra esperanza y fe.
Les rogamos, Padre, Hijo y Espíritu Santo
eterna y amorosa Santísima Trinidad,
que se dignen a escuchar nuestras plegarias y oraciones.
Gracias por escuchar los ruegos de estos padres adoloridos,
por tan sensible perdida,
Gracias Dios bueno, tierno y misericordioso.
eterna y amorosa Santísima Trinidad,
que se dignen a escuchar nuestras plegarias y oraciones.
Gracias por escuchar los ruegos de estos padres adoloridos,
por tan sensible perdida,
Gracias Dios bueno, tierno y misericordioso.
¡Amén!